lunes, 27 de enero de 2014

201 – Peña de Villanueva o Carazo. (Burgos)



Ruta realizada en fecha 26 Enero de 2.014

Ascensión a la Peña de Villanueva o Carazo. (Burgos)

Itinerario:
Carazo – Fuente de la Mora – Soncarazo – Pico de la Rastra – El Nogal – Carazo.

                                           Paisaje sobre la meseta de la Peña de Villanueva o Carazo.


Elías, Nico y Javier.

            Hemos llegado al pueblo de Carazo con una idea determinada para un recorrido que nos llevaría a pasar por el Cuerno Gete, Peñáguila y El Enebral, en el extremo más Oriental de la Sierra Peñas de Cervera situada al Sur de Carazo. Pero nos vemos sorprendidos cuando tomando el camino a la salida del pueblo nos topamos con una clara señal de “Atención, No pasar, Montería”. El cartel incluye la silueta de un jabalí además de una escopeta de caza. En el mismo pueblo un numeroso grupo de cazadores hacen tiempo, suponemos, a que la niebla se disipe. Una niebla bastante densa pero que abriga la esperanza de que en pocas horas termine por abrir.
            Pasamos unos momentos de titubeo pensando en una ruta alternativa. Ya habíamos estado dos años atrás en la Sierra Peña de Villanueva o Carazo al Norte del pueblo. Tengo publicada en el blog y puede verse pinchando sobre este enlace: “Peñas de Carazo desde Carazo”. En aquélla ocasión nos salió un recorrido muy ameno del que Elías y yo, además de quienes en aquélla ocasión nos acompañaban, guardamos un grato recuerdo.
            Hoy nos acompaña Nico que se inicia en esto de “Pasear por la montaña”. Algo sabe de nuestras andanzas habituales y aunque tiene preferencia por otras formas más suaves de pasar su tiempo libre, desea probarse también en estos otros ambientes. Pensamos que lo mejor para él va a ser realizar una ruta no demasiado exigente y a ser posible que no le sobrepase en sus condiciones para que en el futuro vuelva a probar de estas experiencias.
            Desde Carazo (1.130mts) tomamos dirección Norte siguiendo el camino hacia el nacimiento del río Mataviejas en la fuente de la Mora, situado sobre las laderas de Soncarazo o Peña de Villanueva o Carazo. La vez anterior que menciono pasamos junto a la ermita de la Virgen del Sol, pero hoy obviamos el desvío del camino que llega hasta la misma. Continuamos por el camino más próximo al arroyo del incipiente Mataviejas cuyo caudal en esta fecha forma alguna pequeña pero vistosa cascada. La senda jitada nos conduce hasta la meseta superior de la montaña y siguiendo la continuidad de jitos llegamos hasta el borde de la misma donde se descuelgan los cortados de roca en su vertiente Norte. El valle y los pueblos de Ahedo y La Revilla se hallan cubiertos por la niebla pero esta circunstancia también da un ambiente muy singular. 
            Si en la ruta de hace dos años seguimos por la meseta dirección Oeste hacia el collado de la Rasa y la Peña San Carlos, hoy  tomamos dirección Este con intención de llegar hasta su extremo más Oriental: la punta de El Nogal. Antes pasamos por el Pico de la Rastra que no llega a destacar sobre la meseta la cual mantiene una homogénea altitud que ronda los 1.400 mts. La niebla no termina por abrirse sobre todo mirando hacia el Norte y a duras penas logramos divisar la ubicación de Salas, Hacinas, y el más inmediato Villanueva de Carazo que se encuentra a los pies de esta Peña.
            Tras haber llegado hasta este extremo de la Peña nos damos por satisfechos en cuanto a punto más alejado de la ruta de hoy. El regreso, como a nosotros nos gusta, no lo vamos a hacer volviendo sobre nuestros pasos. Intentaremos bajar por la ladera Sur pero como no hay camino alguno por el que seguir, deberemos tantear por dónde acceder a la parte inferior ya que también en esta vertiente hay algunos cortados y no todo es accesible. Por terreno de cascajo salpicado de numerosos ejemplares de enebro, desde la misma punta de El Nogal seguimos a media ladera en desplazamiento claro hacia el Oeste trazando una larga diagonal hasta que ya comprobamos que podemos completar el descenso sin ningún tipo de riesgo de paredes que nos impidan el paso.       
            Alcanzamos la ubicación de las ruinas de una tenada y pocos metros más abajo ya coincidimos con un camino cómodo y limpio de vegetación que nos devuelve al punto que fue el inicio y ahora es el final de la ruta, el pueblo de Carazo.

Fuera de ruta nos acercamos con el coche hasta el cercano desfiladero de La Yecla para mostrárselo a Nico, pues su singularidad merece la pena ser visitado.

Tiempo total que le hemos dedicado a la ruta: 5 horas y 30’.
Desnivel total acumulado de subida: unos  300 metros
Distancia total recorrida: Aprox. 7,600 kms
Climatología: La niebla cubre la montaña y ya sobre ella impide observar las panorámicas hacia el valle que se encuentra al Norte.
Temperatura algo fresca pero sin viento. Muy llevadera.

           

                                                            Plano y referencias tomados del servicio IGN.

A continuación el testimonio gráfico de la ruta,

Iniciamos la ruta de hoy en el pueblo de Carazo.


Hay niebla en el valle. Las montañas también están cubiertas.


La ruta que nos habíamos propuesto para hoy sale por este camino pero la tenemos cortada por esta señal que da un poco de respeto. Tenemos alternativa??


El río Mataviejas nace en las faldas de la cercana Peña Villanueva o Carazo. Podríamos intentar ruta en dirección contraria a la zona que está “tomada” por la “montería”.
Qué le vamos a hacer. Nos ganan!!!.


Dejamos a nuestra espalda el Cuerno Gete, Peñáguila, el Enebral, la Sierra de Cervera… que deberán esperar una nueva oportunidad.
Tomamos el camino que remonta hacia el nacimiento del río Mataviejas y la Peña de Villanueva o Carazo.
La montaña cubierta por la niebla. Pero ésta tiene menos peligro.
En la foto vemos al fondo la ermita de la Virgen del Sol.


Primero un camino y ahora seguimos una senda que trepa por la ladera de la montaña. El terreno es entretenido con los arroyitos y la vegetación de sabinas y enebros.


Nico cruza sin ningún problema el pequeño arroyo del recién nacido Mataviejas.



Se suceden algunos pequeños saltos de agua. 




Esta cascada es la más vistosa de todas las que se suceden a nuestro paso.


Posando Nico y la perra “Deva” con el fondo de la bonita cascada de Mataviejas.


Continuamos por estos agrestes pasajes. Muy bonito. Siempre hacia arriba.


Aunque sea por el mismo lecho del torrente Mataviejas. Esto es muy relajante.


Un poco de esfuerzo por estas pendientes. Verdad Nico?. Mira qué aguja de roca tan bonita tenemos por ahí arriba!!!.



Estás preguntando a Elías si tenemos que subir hasta allá arriba???. Pues claro que sí. Ánimo!!


Un esfuerzo más y ya estamos arriba en la meseta de las Peñas de Villanueva o Carazo.


Ya sobre la meseta se anda más ligero, con menor esfuerzo. Lo difícil ya está superado. Seguimos la continuidad de los jitos que tenemos sobre el terreno.


Los jitos nos conducen hasta la parte opuesta de la meseta. Con la niebla que cubre el valle no podemos ver la profundidad. Vaya cortados!!!



Elías y yo ya habíamos visitado las Peñas de Villanueva o Carazo hace dos años. En aquélla ocasión nos dirigimos hacia el Oeste pasando por el collado de la Rasa y la Peña San Carlos. Hoy tomamos dirección Este para llegar al extremo más Oriental de las Peñas.


Caminando junto al borde de los cortados, de vez en cuando nos detenemos a observar la profundidad de los mismos. Pero la niebla nos impide llegar a ver dónde terminan estas paredes.
Nico disfruta y sigue muy sorprendido con esta su primera excursión de montaña.





Por fin en algunos momentos se apartan las nieblas y podemos ver el valle donde se encuentra el pueblo Ahedo.


Pasamos junto a lo que creemos sea el denominado Pico de la Rastra sin que destaque sobre la homogeneidad de altitud de la meseta. 


En este punto leemos el contenido de la placa conmemorativa.


Continuamos la marcha por la amplia meseta hacia el extremo Oriental: la punta El Nogal.



De aquí ya no se puede pasar. Estamos en la Punta El Nogal. El nombre lo tomo del plano IGN pues aquí no vemos ninguna identificación que lo señale como tal.
Nico y Elías observan hacia las llanuras muy por debajo de nuestra posición.
Mirando hacia el Este vemos que las nieblas bajas han desaparecido pero se mantiene la nubosidad de altura.


También hacia el Sur el valle donde se encuentra el pueblo Carazo a la derecha de la imagen.
Al fondo es la Sierra de las Peñas de Cervera donde sobresale la elevación de Peñáguila. Por ahí teníamos previsto el plan de ruta que hemos tenido que abortar. Otra vez será.


Mirando hacia el Norte aún quedan restos de niebla y no puedo tomar mejor panorámica en la que he querido retratar el pueblo de Villanueva de Carazo.


Emprendemos el regreso. En lugar de volver por el mismo itinerario que hemos traído vamos a intentar descender por la ladera de orientación Sur que no está tan escarpada como la de orientación Norte.
No hay camino, con lo que sobre la marcha investigaremos por dónde podremos descender hasta la base de la montaña que finalmente será más o menos por el perfil que se observa hacia la izquierda después de un largo desplazamiento a media ladera.


A Nico le gusta descender por estos tramos de gravilla. Dice que es divertido.


Elías va por delante observando cómo está el terreno y comprobar si hay algún paso por el que poder descender definitivamente abajo. Hay algunos pequeños cortados de roca y todavía no ha llegado el momento.


Por detrás viene Nico con un poco de cansancio. No está acostumbrado a estos paseos por la montaña y lo nota más que quienes frecuentamos asiduamente este tipo de rutas.


El fruto de la sabina.


Hemos dejado ya atrás la ladera de la Peña y en la parte de abajo pasamos junto a esta tenada en ruina.


Ahora ya seguimos por este cómodo camino entre el bosque de sabinas.


Poco antes de llegar a Carazo Elías vuelve la mirada hacia las Peñas de Carazo por donde hemos andado. Al fondo de la imagen vemos la Peña San Carlos, extremo Occidental de las Peñas de Villanueva o Carazo.


La iglesia de Carazo.


El desfiladero de La Yecla está relativamente cerca de Carazo. Como Nico no lo conoce nos desplazamos hasta allí con el coche para que también pueda disfrutar de este singular paraje.




Nos sorprende ver a una persona que este corto recorrido lo hace por el fondo del barranco metido en el agua.


En esta cascada debe de hacer un corto rápel.



Afición para todo. Con lo fría que debe de estar el agua!!!.


10 comentarios:

  1. Hola Javier,que buena entrada y que vistas tan estupendas,nosotros hemos hecho este finde una
    y me vine disilucionado,porque no pudimos pasar de la mitad del cerro por la nieve,no sabiamos que estaba nevado,ya que estamos aquí lo intentamos pero nada,otra vez sera.Un saludo.

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    1. Hola Juan Carlos.
      Nos salió una ruta corta pero entretenida. Y ya lo siento por vosotros que no pudísteis completar lo que teníais previsto. A nosotros también nos condicionó la montería anunciada y tuvimos que cambiar los pranes que en un principio habíamos planeado. Pero como bien dices, otra vez será.
      Un saludo,
      Javier

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  2. Podría comentar muchas cosas de esta entrada.. !!
    En primer lugar, una pena tanta niebla a vuestro alrededor, pero por otra parte sacaste alguna foto muy chula gracias e ella!
    Me gusta una foto en la que se ve a Niko al fondo intenando asomarse en un saliente de la montaña, y Deva se queda un poquitín rezagada, consciente de que no es prudente hacercarse más al filo!!
    Y por último, me encanta el bañista oye!! jajajajaja

    Qué bien que pasaráis un buen día, seguro que se repetirá no tardando, cualquier día doy yo la sorpresa :)

    Ureta Jr.

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    1. Cada vez tienes menos excusa, Elena, para lo que dices que cualquier día nos das tú la sorpresa.
      Rutas como la de esta entrada, cortita, sin mucha exigencia, ya puedes hacerlas.Solo es poner un poco de voluntad para querer venir. Piensa que después no te vas a arrepentir de los pequeños sacrificios que ello supone. Las gratificaciones emocionales lo compensan. Como las fotos que has podido ver y que dices que te gustan. Pero mejor es vivirlo.
      Bueno. Ya nos dirás cuándo te sientes dispuesta. Verás qué día más bueno que pasas.
      Un beso,

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  3. Un recorrido muy apetecible este que nos muestras por las Peñas del Carazo y que Elías y tú conocéis bien, habiéndonoslo mostrado en otra ocasión de la que recordamos excelentes panorámicas por la buena visibilidad del día.
    Hoy, os acompañó la niebla pero aún así, le has sabido sacar partido a la fotografía, otra de tus aficiones varias, y así mostrarnos los puntos más emblemáticos del camino como esa escarpada aguja, o esos cortados al vacío a los que parece que se asoman sin miedo tus acompañantes.
    Es seguro que el amigo a quién habéis iniciado en esta disciplina habrá quedado muy satisfecho de la experiencia y se sumará, en más ocasiones, a vuestras expediciones que siempre convertís en aventuras de las que se saca muy buen provecho... y hablamos con conocimiento de causa.
    Una lástima que esas monterías le estén poniendo barreras al campo, cosa que por otra parte no se entiende porque el campo es de todos y todos deberíamos poder hacer el mismo uso y disfrute.
    Como siempre, Javier... una crónica sin desperdicio.
    La siguiente, seguro que, de nuevo... subido a tus cuchillas.
    Un abrazo.

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    1. Pudimos sacar partido a la jornada después de que se nos truncase la primera opción que llevábamos. No debíamos exponernos a ningún incidente pues seguro que llevaríamos las de perder. El caso es que en todo el tiempo no logramos escuchar ni un solo tiro. Se les daría mal la montería a los cazadores o cambiaron sus planes?.
      De todas formas terminamos satisfechos con el suave paseo y el iniciado Nico ya está esperando a ver dónde le llevamos la próxima. Está claro que disfrutó de esta su primera experiencia por la montaña y nos alegramos por ello.
      Creo que con las nevadas de estos últimos días ya se nos estará poniendo la montaña en condiciones de volver a colocarnos los esquís. A ver si entre borrasca y borrasca podemos aprovechar alguna ventana de buen tiempo.
      Un abrazo a los amigos Juan MIguel y Tere.
      Javier

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  4. Qué buenos recuerdos Javier me trae esta ruta ¡
    Aquella vez saqué, para mi gusto, los más sorprendentes primeros planos del Buitre Leonado que forman parte ahora de mi archivo personal.
    Pena de nieblas...lo bueno que al final del día se abrieron y os dejaron disfrutar de las vistas.
    Que bueno Nico ¡¡. Me alegro un montón que se animara a marchar con vosotros al monte.
    La ruta, corta y agradable, fue muy bien elegida para poder iniciarse. Espero que sumara buenas sensaciones y quiera repetir experiencia. Y si con esas se anima la prima Elena para una futura excursión pues mejor que mejor. Lo bueno, si es compartido, dos veces bueno.
    Un abrazo para todos.
    Kike

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    1. Hola, Kike.
      No cabe duda que a los que hace dos años anduvimos por las Peñas de Carazo nos dejó un recuerdo muy grato pues nos sorprendió por el bonito recorrido que realizamos en aquélla ocasión .
      Ahora hemos vuelto y completado lo que en aquélla ocasión nos quedó por andar de estas Peñas. Lo de la niebla ha sido un aliciente que le daba ambiente a los cortados de las Peñas.
      Aunque ha sido un recorrido cortito también hemos disfrutado y a Nico le ha entusiasmado. A ver cuándo tenemos nueva oportunidad para ofrecerle una ruta que sea adecuada a sus características. En cuanto a Elena... Ya veremos. Lo veo un poco difícil. Pero como ella dice, a lo mejor nos sorprende cualquier día.
      Un abrazo,
      Javi

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  5. He hecho un recorrido parecido a este varias veces. La verdad es que los comentarios son muy completos, se nota la profesionalidad. Es una ruta muy bonita y con unas vistas espléndidas sobre todo en la zona de Villanueva de Carazo. Una pena que ese dia precisamente se celebrase la montería y encima hubiera niebla

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    1. Gracias Lucinio por tu visita y comentario.
      Nosotros hemos estado ya dos veces por la zona y sigue gustándonos. Nos queda andar la parte que por tema de caza no pudimos recorrer hacia Peñáguila y el Enebral.
      A ver si más adelante podemos disponer de alguna fecha para acercarnos de nuevo por ahí. Efectivamente merece la pena.
      Un saludo,
      Javier

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